Enfoque integrador

En el enfoque integrador, los niños con y sin discapacidad se reúnen en un grupo de guardería. El objetivo es fomentar la convivencia y la tolerancia. El objetivo del concepto es promover la igualdad de oportunidades de los niños con discapacidad (en la sociedad).

Niños con y sin discapacidad en un grupo

En el enfoque integrador -a diferencia del enfoque inclusivo- se parte de la base de que ya existen las estructuras necesarias para eliminar las desigualdades entre los niños con y sin discapacidad. Se trata de reunir a los niños con y sin discapacidad en un grupo y dejar que experimenten cosas juntos. La primera piedra para ello la puso Pestalozzi, que en aquella época también abogaba por la educación de los niños con discapacidad. Los educadores: Quienes trabajan en una guardería inclusiva tienen una formación especial. La proporción de cuidadores también es mayor que en las guarderías normales. Hay más cuidadores por niño en las guarderías inclusivas.

El enfoque inclusivo: un concepto de tolerancia y aceptación

La atención se centra en la aceptación de las diferencias de los niños con y sin discapacidad, sin juzgarlas. Por un lado, se reconoce la individualidad y singularidad de los niños y, al mismo tiempo, se acepta sin juzgarlos. Los valores que se deben enseñar a los niños son la consideración, la tolerancia y la unión. Parece posible una combinación con otros conceptos, como los enfoques abiertos, semiabiertos o situacionales, para seguir fomentando la integración y la igualdad de oportunidades de los niños con discapacidad.

Las ventajas del enfoque integrador son:

• Fomentar la tolerancia y el comportamiento social

• Los niños con y sin discapacidad entran en contacto y pueden aprender unos de otros

• Los niños con discapacidad reciben apoyo

• Eliminación de barreras y obstáculos para los niños discapacitados

• Mayor aceptación de la diferencia y la alteridad

Podrían identificarse desventajas:

• Mayores costes

• Pocas plazas para niños con discapacidad

• Prejuicios contra las guarderías inclusivas

• Escasez de personal pese al aumento de la ratio

• Pocos especialistas en integración